jueves, 14 de octubre de 2010

Un día en Huchuy Yachaq

Un día antes de convertirme en peruana, alguien me dijo ante mis mil y una propuestas para el proyecto, que me relajara. Que al llegar me tomase un par de días para observarlo todo. Que de esta manera descubriría un caos, un caos al que no debería enfrentarme para intentar ordenar, sino un caos al que tendría que unirme para poco a poco sacar algo bueno de él. Hasta hoy el caos me hacía ilusión, estaba encantada con las mil y una novedades por día. Hoy ha podido conmigo. Pero solo hoy eh? Hay tantísimo que hacer, es tan difícil, tan pocos recursos, tantas necesidades básicas que se pasan por encima…
Llevo ya una semana por estas tierras y esas miradas infantiles de las que hablaba en la primera entrada, son ahora mi día a día. Sin embargo voy descubriendo muchas cosas en ellas: inquietudes, ilusiones, miedos y vergüenzas.
Llego cada mañana a las 9.00. Por la interminable cuesta voy encontrando niños perdidos que recojo y subo al proyecto entre besos, abrazos y “buenos días profe”. Ya en la guardería “Las hormiguitas” cantamos y desfilamos para entrar en el “el salón” donde lo primero que hacemos es pasar lista: Luz Karina, John Wilber, Deiby David, Mialú, Yasmina, Estefany, Jeferson, Jeimy, Livia, Ananí, Andrea, Luís Pablo… Tras un enérgico “presente” se van sentando y… ¡empezamos! Recortes con punzones, dibujos, acuarelas, puzles y canciones van llenando la mañana.
-“¡Profe, profe, profe; Jonh Wilber esta jalándome de la Chompa! “
-“¡ Profe, profe profe: puede ponerme ahí abajito mi nombresito?
- “¡Profe, profe, profe; ¿leemos el cuento de los tres chanchitos?
A las 11.30 nos lavamos las manos, salimos al recreo y esperamos el “ Lonche”. Cada día cocina una madre del asentamiento para todos ellos. Disfrutan como locos, en los mismos sitios donde media hora antes recortaban, de una comida que a cualquiera de nosotros nos parecería el “mayor de los bajones”. Y es que muchos de ellos solo se llevan a la boca lo que le damos en el proyecto, así que más les vale no hacerle ascos sino quieren ayunar hasta el día siguiente. Pobriños. Tras los manjares, revisamos la tarea y ponemos la del día siguiente.
Esa tarea hay quien la hace en casa. Sino a las 15.30 comienza la revolución. Uno a uno van llegando, ¡¡de todas las edades!! Hoy mismo mientras citaba recursos naturales no renovables, al mismo tiempo buscaba metáforas, enseñaba a dividir por dos cifras, el gentilicio de Puerto Rico y me sacaba a un par de hormiguitas de encima. Buf, es demasiado. Espero que la semana que viene, ya más metida en el caos, os pueda escribir con más alegría y orden. Aun así disfruto cada día y pienso en cosas que hacer con ellos. Talleres, actividades, cosas que aportar al proyecto. Cualquier sugerencia por vuestra parte será bien recibida.
Además del proyecto, en el que pasamos casi todo el día, gastamos la mayor parte de nuestra energía y ocupamos casi todos nuestros pensamientos; están nuestros ratos libres. Ya soy fan number one del grupo de música del que os hablé el otro día, ya conozco varios sitios de marchilla cusqueña, y de vez en cuando nos permitimos el lujillo de comer por 6 soles (euro y medio) en un restaurante vegetariano muy molón. Aun me queda mucho por aquí y estoy segura de que va a ser algo increíble. Por ahora hago un esfuerzo por “caotizarme”. A ver si el Machu Picchu, que visitaré este fin de semana, me ayuda. Buenas noches
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5 comentarios:

  1. Juliña! soy mere! no sabia de tus andares...pero me ha encantado leer la entrada y me voy a leer el resto!!!! mucho animo!!!!!

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  2. Grandes cambios precisan rápidas adaptaciones para no volverte loco. Yo también tuve un "día de esos" la semana pasada y una vez metido en su caos todo se ve diferente, aunque te sigan chocando cosas, si no qué aburrimiento no???
    Te veo muy bien.
    Un besazo
    Manué

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  3. Jula Jop!!seguramente no comprenda ni medianamente bien lo que explicas, pero he intenado ponerme en tu piel y creo que no tienes más que pensar que ya formas parte de ese kaos. Es una simpleza lo que te voy a decir....pero "si no puedes con ellos, únete a ellos". No te queda más remedio que aprender a vivir en ese Kaos e intentar ordenarlo a tu manera, pero sin hacer un desorden en lo ya desordenado. Es complicado y que tengas días en los que menos sonrisas formen parte de tí, es normal...también eres humana churriña!!!

    A comerse el planeta, que ya sabes que es nuestro;)Blanch te manda todos sus mimos para que los guardes y los dosifiques en días como estos!!!para los días bueno, al fin y al cabo, ya tienes demasiadas hormiguitas...;)tq

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  4. ideas xa esos locos bajitos: hacer un elefante d cartulina y con los ojos cerrados pinchar la cola, hacer muchos bailes y mucha gimnasia xa dejarlos fritos, canciones, murales con las manos pintadas, pompas d jabon, saltar a la cuerda.... son algunas d las cosas q les encantaban a mis niños indios! me encanta leerte juls! t echo tanto d mnos! y estoy tan contenta d q estes ahi! pensar q a lo mjor dntro d poqito stoy ahi... (Glo)

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  5. Con todo lo que te han dicho, con cualquier cosa que diga creo q me quedaría corta, solo decir q mucho ánimo Ju, q la experiencia q estás viviendo por todo lo que nos cuentas debe ser TAN increíble, q no dudaría si pudiese en irme contigo, como en todos sitios hay días buenos y malos, pero ya solo con lo q estás haciendo te deberias sentir la persona mejor del mundo ayudando a toda esa gente! te kiero Ju!!

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